A menudo, escuchamos bonitos discursos en defensa de la familia. Generalmente, los mismos plantean la búsqueda de un ideal que está lejos de la realidad, detienéndose en declaraciones contra el divorcio o la homosexualidad, como si estas realidades fueran en sí mismas patológicas, y resultase posible evadirlas con la mera mención crítica.
Sin dudas, la familia es la institución básica de la sociedad. La más importante y la primera que contiene al ser humano, aun desde antes de nacer. Es el núcleo básico de la educación del hombre y de transmisión de valores.
Toda persona que nazca y crezca en una familia sana tendrá mayores posibilidades de realización personal y social, que quien haya carecido de ella. Por éso es que todos los seres humanos tienen derecho a una familia.
También es cierto que la integridad de la familia viene siendo atacada, pero no por conjuras de inmoralidad, sino por factores concretos -propios de este tiempo- que conspiran contra su solidez. Es deber del Estado desarrollar las políticas sociales necesarias para defender -concreta y realmente- el concepto de familia.
Algunas de ellas son:
1. Favorecer el desarrollo de aquéllas actividades económicas que generen una alta demanda de empleo y el fortalecimiento del salario.
2. Promover una legislación que preserve el derecho de propiedad y el acceso a una vivienda digna.
3. Contener a las personas más debilitados de la escala social, obligándose a terminar con el hambre, la marginalidad, la desnutrición infantil y el abandono de la ancianidad.
4. Estimular la cultura del trabajo, evitando el clientelismo y la expectativa de la dádiva.
5. Garantizar la libertad religiosa.
6. Defender el valor de la vida desde su concepción, desalentando cualquier grado de legalización del aborto, y de manipulaciones pseudocientíficas de la vida de las personas.
7. Desarrollar un programa de educación sexual que incluya a las familias, el Estado, las ONGs, especializadas y los diferentes cultos.
8. Proveer a la salud de la población, construyendo nuevos establecimientos, asegurando los recursos financieros necesarios, sosteniendo el salario de los profesionales, coordinando funciones entre sus tres niveles y defendiendo el sistema de obras sociales.
9. Luchar contra todas las adicciones, -en especial droga y alcoholismo- en forma coordinada con las organizaciones no gubernamentales especializadas.
10. Proveer a la educación de la población, construyendo nuevos establecimientos, asegurando los recursos financieros necesarios, sosteniendo el salario de los profesionales, coordinando funciones entre sus tres niveles, modernizando el sistema educativo, actualizando contenidos, y propendiendo a tender un puente efectivo entre los mundos educativo y productivo, implementando un plan de alfabetización informática en todo el país.
11. Estimular el deporte como factor de integración social, y auxiliar de la salud y la educación, tanto en apoyo a los atletas de élite como a los deportistas de base, clubes, federaciones y demás entidades deportivas.
12. Preservar el sistema previsional, asegurando a los jubilados y pensionados haberes dignos, y una cobertura de salud eficiente, a través de un sistema administrado con transparencia e idoneidad.
lunes, 30 de agosto de 2010
La participación de los cristianos en política
Casi seis millones de argentinos hemos elegido una forma especial de vida cristiana.
Para nuestra Argentina, inspirados en el llamado de Dios a vivir en su Reino, nuestro sueño es construir una Patria grande en la que habite un pueblo feliz.
Tradicionalmente, los cristianos -al igual que la mayoría de los argentinos- hemos estado alejados de la participación ciudadana. Uno de los efectos más devastadores de la dictadura 1976/83, fue inculcar en nuestras mentes el desprecio por la política, considerándola una actividad propia de ladrones y sinverguenzas.
Tras la primavera del '83, volvimos a caer en la decepción tras los sucesos de diciembre de 2001. Como sociedad le hicimos la cruz a la democracia y a la participación, dejándole -una vez más- el camino libre a los corruptos e ineptos que arruinaron el país.
Convocamos a todos los cristianos a comprometernos en la tarea de ganar la Argentina para Jesucristo.
Invitamos a provocar una profunda restauración de valores en nuestra nación: a creer otra vez en el trabajo, la decencia, el patriotismo, la solidaridad, el estudio, la tolerancia, la autoridad, la igualdad...
Instamos a construir -con esos valores- un gran proyecto nacional basado en la democracia, la justicia social, el desarrollo económico, la emancipación nacional, la integración latinoamericana y la identidad cultural.
Los cristianos tenemos que salir al mundo -sin dogmatismos ni prejuicios- convencidos en el poder de nuestra Fe en Jesucristo, el hijo de Dios vivo.
También en política, para el que cree, todo es posible.
Para nuestra Argentina, inspirados en el llamado de Dios a vivir en su Reino, nuestro sueño es construir una Patria grande en la que habite un pueblo feliz.
Tradicionalmente, los cristianos -al igual que la mayoría de los argentinos- hemos estado alejados de la participación ciudadana. Uno de los efectos más devastadores de la dictadura 1976/83, fue inculcar en nuestras mentes el desprecio por la política, considerándola una actividad propia de ladrones y sinverguenzas.
Tras la primavera del '83, volvimos a caer en la decepción tras los sucesos de diciembre de 2001. Como sociedad le hicimos la cruz a la democracia y a la participación, dejándole -una vez más- el camino libre a los corruptos e ineptos que arruinaron el país.
Convocamos a todos los cristianos a comprometernos en la tarea de ganar la Argentina para Jesucristo.
Invitamos a provocar una profunda restauración de valores en nuestra nación: a creer otra vez en el trabajo, la decencia, el patriotismo, la solidaridad, el estudio, la tolerancia, la autoridad, la igualdad...
Instamos a construir -con esos valores- un gran proyecto nacional basado en la democracia, la justicia social, el desarrollo económico, la emancipación nacional, la integración latinoamericana y la identidad cultural.
Los cristianos tenemos que salir al mundo -sin dogmatismos ni prejuicios- convencidos en el poder de nuestra Fe en Jesucristo, el hijo de Dios vivo.
También en política, para el que cree, todo es posible.
Entre Arizona y Buenos Aires
La jueza Susan Bolton ha decidido suspender algunas secciones de la ley SB 1070. De acuerdo con las primeras informaciones algunas de las secciones más polémicas de la ley fueron bloqueadas a favor de los grupos pro inmigrantes.
Cuando faltaba un día para que entrara en vigencia la ley de Arizona que criminaliza la inmigración ilegal, la jueza citada bloqueó las partes más polémicas de la ley, otorgándole una importante victoria legal a los opositores de la medida.
La ley entra en vigencia sin muchas de las disposiciones que enfurecieron a los opositores, incluyendo secciones que requieren a los agentes que hagan cumplir otras leyes que comprueben si los sospechosos residen legalmente en el país.
La juez también puso en suspenso una parte de la ley que obligados a los inmigrantes a portar sus documentos en todo momento y que hacia ilegal que los trabajadores indocumentados solicitaran trabajo en lugares públicos.
El fallo se produjo justo cuando la Policía estaba haciendo preparativos de último minuto para comenzar a aplicar la ley y mientras activistas estaban planeando grandes manifestaciones contra la medida.
La Policía de todo el estado, fronterizo con México, dio el martes los últimos toques al entrenamiento de los agentes, incluyendo la forma de evitar la etiquetación racial y la posibilidad de un gran incremento de las detenciones. La etiquetación racial ("racial profiling" en inglés) se refiere al uso incorrecto de la raza de un individuo o grupo étnico por la Policía como un factor para decidir si aplica la ley, como en el caso de pedirle a una persona que e detenga por una infracción de tránsito.
Esta situación muestra el conflicto de intereses y valores que se suele dar cuando un país intenta aplicar una política restrictiva en materia de inmigración.
Por un lado, es legítimo que una nación decida poner límites a la entrada de extranjeros a su territorio, sobre todo en tiempos críticos o inestables para su economía. Por el otro, la aplicación extrema de dichas medidas a menudo importa una violación a derechos humanos básicos, como la igualdad ante la ley y el respeto y la tolerancia a que son dignos todos los seres humanos.
Salvando las distancias, la Argentina vive una situación comparable. Todos los días entran al país miles de inmigrantes de países hermanos, huyendo de la pobreza y soñando un futuro de promisión en nuestro país, que normalmente no está en condiciones de garantizar.
Muchos se ven obligados a cometer una cadena de delitos: entran ilegalmente al país, toman casas, venden mercadería trucha ocupando irregularmente el espacio público.
Varios de ellos llenan los turnos de los hospitales públicos y las vacantes de los establecimientos educativos estatales, sostenidos con recursos de los argentinos.
Pero es necesario recordar que los inmigrantes provienen de naciones hermanas, con las que nos une un mismo pasado y un mismo destino. El camino no es el enfrentamiento entre hermanos, sino la cooperación y la solidaridad.
La Argentina debe hacer prevalecer la ley antes que nada, y sentarse a negociar con las autoridades de los países latinoamericanos, la solución de los problemas puntuales que ocasiona la inmigración ilegal.
Cuando faltaba un día para que entrara en vigencia la ley de Arizona que criminaliza la inmigración ilegal, la jueza citada bloqueó las partes más polémicas de la ley, otorgándole una importante victoria legal a los opositores de la medida.
La ley entra en vigencia sin muchas de las disposiciones que enfurecieron a los opositores, incluyendo secciones que requieren a los agentes que hagan cumplir otras leyes que comprueben si los sospechosos residen legalmente en el país.
La juez también puso en suspenso una parte de la ley que obligados a los inmigrantes a portar sus documentos en todo momento y que hacia ilegal que los trabajadores indocumentados solicitaran trabajo en lugares públicos.
El fallo se produjo justo cuando la Policía estaba haciendo preparativos de último minuto para comenzar a aplicar la ley y mientras activistas estaban planeando grandes manifestaciones contra la medida.
La Policía de todo el estado, fronterizo con México, dio el martes los últimos toques al entrenamiento de los agentes, incluyendo la forma de evitar la etiquetación racial y la posibilidad de un gran incremento de las detenciones. La etiquetación racial ("racial profiling" en inglés) se refiere al uso incorrecto de la raza de un individuo o grupo étnico por la Policía como un factor para decidir si aplica la ley, como en el caso de pedirle a una persona que e detenga por una infracción de tránsito.
Esta situación muestra el conflicto de intereses y valores que se suele dar cuando un país intenta aplicar una política restrictiva en materia de inmigración.
Por un lado, es legítimo que una nación decida poner límites a la entrada de extranjeros a su territorio, sobre todo en tiempos críticos o inestables para su economía. Por el otro, la aplicación extrema de dichas medidas a menudo importa una violación a derechos humanos básicos, como la igualdad ante la ley y el respeto y la tolerancia a que son dignos todos los seres humanos.
Salvando las distancias, la Argentina vive una situación comparable. Todos los días entran al país miles de inmigrantes de países hermanos, huyendo de la pobreza y soñando un futuro de promisión en nuestro país, que normalmente no está en condiciones de garantizar.
Muchos se ven obligados a cometer una cadena de delitos: entran ilegalmente al país, toman casas, venden mercadería trucha ocupando irregularmente el espacio público.
Varios de ellos llenan los turnos de los hospitales públicos y las vacantes de los establecimientos educativos estatales, sostenidos con recursos de los argentinos.
Pero es necesario recordar que los inmigrantes provienen de naciones hermanas, con las que nos une un mismo pasado y un mismo destino. El camino no es el enfrentamiento entre hermanos, sino la cooperación y la solidaridad.
La Argentina debe hacer prevalecer la ley antes que nada, y sentarse a negociar con las autoridades de los países latinoamericanos, la solución de los problemas puntuales que ocasiona la inmigración ilegal.
Evita y el feminismo
EL HOGAR O LA FÁBRICA
Todos los días millares de mujeres abandonan el campo femenino y empiezan a vivir como hombres.
Trabajan casi como ellos. Prefieren, como ellos, la calle a la casa. No se resignan a ser ni madres, ni esposas.
Sustituyen al hombre en todas partes.
¿Eso es "feminismo"? Yo pienso que debe ser más bien masculinización de nuestro sexo.
Y me pregunto si todo este cambio ha solucionado nuestro problema.
Pero no. Todos los males argentinos siguen en pie y aun aparecen otros nuevos. Cada día es mayor el número de mujeres jóvenes convencidas de que el peor negocio para ellas es formar un hogar.
Y sin embargo para eso nacimos.
Allí está nuestro más grave problema.
Nos sentimos nacidas para el hogar y el hogar nos resulta demasiada carga para nuestros hombros.
Renunciamos al hogar entonces... salimos a la calle en busca de una solución... sentimos que la solución es independizarnos económicamente y trabajamos en cualquier parte... pero ese trabajo nos iguala a los hombres y... ¡no! No somos como ellos... ellos pueden vivir solos... nosotros no... nosotros sentimos necesidad de compañía, de una compañía total... sentimos la necesidad de darnos más que de recibir... ¡No podemos trabajar nada más que para ganar un sueldo como los hombres!
Y por otra parte, si renunciamos al trabajo que nos independiza para formar un hogar... quemamos allí mismo nuestras naves definitivamente.
Ninguna profesión en el mundo tiene menos posibilidades de retorno como nuestra profesión de mujeres.
Aun si nos elige un hombre bueno... nuestro hogar no siempre será lo que hemos soñado cuando solteras.
En las puertas del hogar termina la nación entera y comienzan otras leyes y otros derechos... la ley y el derecho del hombre... que muchas veces sólo es un amo y a veces también... dictador.
Y allí nadie puede intervenir.
La madre de familia está al margen de todas las previsiones. Es el único trabajador del mundo que no conoce salario, ni garantía de respeto, ni límites de jornadas, ni domingo, ni vacaciones, ni descanso alguno, ni indemnización por despido, ni huelgas de ninguna clase... Todo es -así lo hemos aprendido desde "chicas"- pertenece a la esfera del amor... ¡y lo malo es que el amor muchas veces desaparece pronto en el hogar... y entonces todo pasa a ser "trabajo forzado"... obligaciones sin ningún derecho...! ¡Servicio gratuito a cambio de dolor y sacrificios!
Yo no digo que siempre sea sí. No tendría yo derecho a decir nada, desde que mi hogar es feliz... si no viera todos los días el dolor de tantas mujeres que viven así... sin ningún horizonte, sin ningún derecho, sin ninguna esperanza.
Por eso cada día hay menos mujeres para formar hogares...
¡Hogares verdaderos, unidos y felices! Y cada día el mundo necesita en realidad más hogares y, para eso, más mujeres dispuestas a cumplir bien su destino y su misión. Por eso el primer objetivo de un movimiento femenino que quiera hacer bien a la mujer... que no aspire a cambiarlas en hombres, debe ser el hogar.
Nacimos para constituir hogares. No para la calle. La solución nos la está indicando el sentido común. ¡Tenemos que tener en el hogar lo que salimos a buscar en la calle: nuestra pequeña independencia económica... que nos libere de ser pobres mujeres sin ningún horizonte, sin ningún derecho y sin ninguna esperanza!
"La razón de mi vida" cap. 48
Pobreza y marginalidad
MAS QUE VENCEDORES apoyó la decisión del gobierno nacional de extender el beneficio de asignación básica por hijo para aquéllos trabajadores que no estén registrados o estén desocupados.
Resultó una medida acertada porque favorece la inclusión de millones de argentinos sumidos en la pobreza y en la marginalidad. Esperamos que el sistema no se preste a deleznables prácticas clientelares.
Esta medida fue largamente reclamada por la oposición, y aunque no reúne exactamente los alcances solicitados por ella, entendemos que debe apoyársela sin especulaciones políticas subalternas.
Pero, asimismo, resulta insuficiente frente al drama de la pobreza, que se extiende por todo el territorio nacional. Pese al tan declamado "modelo productivo" que presuntamente desarrolla el gobierno nacional, millones de argentinos viven en condiciones lamentables, sin ninguna perspectiva de cambio.
Entendemos que deben descentralizarse la mayoría de los programas sociales, dado que las necesidades básicas de la población son conocidas principalmente por las autoridades provinciales y municipales. La lucha contra la pobreza debe ser una política de Estado, en la que no esté presente la bandería partidaria de los funcionarios de turno.
Todo ello, dentro de un proyecto nacional basado en la producción y la justicia social. Las mayores fuentes de pobreza son el subdesarrollo y la inflación, que castigan antes que a nadie a los más pobres.
Resultó una medida acertada porque favorece la inclusión de millones de argentinos sumidos en la pobreza y en la marginalidad. Esperamos que el sistema no se preste a deleznables prácticas clientelares.
Esta medida fue largamente reclamada por la oposición, y aunque no reúne exactamente los alcances solicitados por ella, entendemos que debe apoyársela sin especulaciones políticas subalternas.
Pero, asimismo, resulta insuficiente frente al drama de la pobreza, que se extiende por todo el territorio nacional. Pese al tan declamado "modelo productivo" que presuntamente desarrolla el gobierno nacional, millones de argentinos viven en condiciones lamentables, sin ninguna perspectiva de cambio.
Entendemos que deben descentralizarse la mayoría de los programas sociales, dado que las necesidades básicas de la población son conocidas principalmente por las autoridades provinciales y municipales. La lucha contra la pobreza debe ser una política de Estado, en la que no esté presente la bandería partidaria de los funcionarios de turno.
Todo ello, dentro de un proyecto nacional basado en la producción y la justicia social. Las mayores fuentes de pobreza son el subdesarrollo y la inflación, que castigan antes que a nadie a los más pobres.
82% móvil
Cuatro millones de jubilados y pensionados esperan de las autoridades nacionales una solución a su afligente situación económica. Haberes de novecientos pesos los condenan al hambre, la enfermedad y la muerte.
La implementación del 82% móvil para las jubilaciones mínimas significan un mínimo atenuante para tanta injusticia.
El Estado Nacional cuenta con los recursos necesarios para ello. Negarse a ejecutar una medida así sólo puede estar motivado por la pretensión de manejar a piacere los cuantiosos fondos del ANSES, con el oscuro objetivo de someter políticamente a gobernadores e intendentes.
La implementación del 82% móvil para las jubilaciones mínimas significan un mínimo atenuante para tanta injusticia.
El Estado Nacional cuenta con los recursos necesarios para ello. Negarse a ejecutar una medida así sólo puede estar motivado por la pretensión de manejar a piacere los cuantiosos fondos del ANSES, con el oscuro objetivo de someter políticamente a gobernadores e intendentes.
Matrimonio homosexual
MAS QUE VENCEDORES apoyó la convocatoria realizada por ACIERA y FECEP, para el pasado lunes 31 de mayo frente al Congreso Nacional, en defensa de la familia, el matrimonio varón-mujer y el derecho de todo niño a tener padre y madre.
El proyecto de reforma de la ley de matrimonio civil fue aprobado en el Congreso Nacional tras un brevísimo debate. Fue utilizado como moneda de cambio para frenar la aprobación de la reforma al impuesto al cheque, que hubiera significado una enorme transferencia de recursos y poder político del gobierno nacional en favor de las provincias.
Entendemos que el tema debió ser enfocado con seriedad y sin etiquetas ideológicas. Tanto quienes estaban a favor, como quienes estamos en contra de esta reforma, debimos habernos tratado con respeto, sin ningún tipo de descalificación ni discriminación, abordando sin tapujos todos los aspectos que el tema involucra.
Lamentablemente, no fue así. Quienes llevaron adelante la discusión, lo hicieron -en su mayoría- apegados a dogmas, con poca predisposición a la negociación. Ni los homosexuales son enfermos, ni quienes nos opusimos al proyecto somos cavernarios.
Salvo escasas excepciones, dentro de las filas contrarias al proyecto, faltó capacidad política para exponer y defender ideas, y habilidad para construir consensos dentro del ámbito parlamentario. Se permitió mansamente quedar estigmatizados frente a la opinión pública, como reaccionarios e intolerantes.
Como cristianos, entendemos que no se empleó el mismo énfasis en otros temas tanto o más importantes para la sociedad, como la pobreza, los jubilados, la droga...
Invitamos a todos los cristianos y a los argentinos de buena voluntad , a defender los valores en los que creemos, con hidalguía y convicción, pero también con astucia y capacidad política.
Buenos Aires, julio de 2010
El proyecto de reforma de la ley de matrimonio civil fue aprobado en el Congreso Nacional tras un brevísimo debate. Fue utilizado como moneda de cambio para frenar la aprobación de la reforma al impuesto al cheque, que hubiera significado una enorme transferencia de recursos y poder político del gobierno nacional en favor de las provincias.
Entendemos que el tema debió ser enfocado con seriedad y sin etiquetas ideológicas. Tanto quienes estaban a favor, como quienes estamos en contra de esta reforma, debimos habernos tratado con respeto, sin ningún tipo de descalificación ni discriminación, abordando sin tapujos todos los aspectos que el tema involucra.
Lamentablemente, no fue así. Quienes llevaron adelante la discusión, lo hicieron -en su mayoría- apegados a dogmas, con poca predisposición a la negociación. Ni los homosexuales son enfermos, ni quienes nos opusimos al proyecto somos cavernarios.
Salvo escasas excepciones, dentro de las filas contrarias al proyecto, faltó capacidad política para exponer y defender ideas, y habilidad para construir consensos dentro del ámbito parlamentario. Se permitió mansamente quedar estigmatizados frente a la opinión pública, como reaccionarios e intolerantes.
Como cristianos, entendemos que no se empleó el mismo énfasis en otros temas tanto o más importantes para la sociedad, como la pobreza, los jubilados, la droga...
Invitamos a todos los cristianos y a los argentinos de buena voluntad , a defender los valores en los que creemos, con hidalguía y convicción, pero también con astucia y capacidad política.
Buenos Aires, julio de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)